Desde hace mucho tiempo, y como dije en alguna publicación anterior, las culturas del mundo han utilizado diversas especies vegetales, para alimentación, medicina, ornamento y también con objetivos mágicos, entendiéndose por esto toda práctica con fines metafísicos, desde chamanismo, magia ceremonial, incluso las actividades propias de diferentes religiones. En esta publicación voy explicar un poco sobre el aspecto mágico ligado al mundo vegetal.
En cuanto a los fines metafísicos podemos ver, por ejemplo, el uso de ciertos hongos, Ayahuasca, Cannabis, Belladona y un largo etc. con fines mágicos y por lo tanto, sagrado. Al decir sagrado, me refiero a la acepción que se les da a prácticas que buscan salir del tiempo lineal y cotidiano. En el uso de sustancias vegetales como las mencionadas más arriba, aquellas o aquellos que las utilizaban o utilizan, han tenido o poseen la intención de establecer algún tipo de acceso a planos o espacios distintos de este, servían como amplificadores, catalizadores, auxiliares que permitían al individuo tener una percepción más intensa, libre, y quizás más completa del mundo. Lo que se traduce en una experiencia mística, algo que podríamos llamar espiritual. Para elles, esto era un hecho y totalmente real, esta experiencia los hacia más conscientes del entorno, en ese estadio las polaridades se desdibujaban, todo se ajustaba, lo caótico, disruptivo, lo armónico y estable, todo se volvía unidad. Estas experiencias son una parte del uso que se le da a ciertas sustancias vegetales en el ámbito metafísico y quizás en otro momento me extienda más sobre este tipo de experiencia.
Ahora bien, además de esas prácticas en donde se ingerían, bebían o fumaban aquellas sustancias, las que podrían clasificarse como internas, existían las experiencias externas, por llamarlas de alguna manera, en donde se utilizaban y utilizan sustancias vegetales tales como resinas, ramilletes de diversas hierbas, flores, etc. para su quema con alguna intención, sahumar espacios, para baños corporales o en el uso de amuletos. Sobre estos usos en el ámbito mágico-herbal, me referiré acá.
El uso de ciertas hierbas se daba en determinado horario astrológico y en algunos casos las hierbas se asociaban a ciertas deidades dependiendo de la cultura y el sistema de creencias de estas y se daba en un marco de relaciones simbólicas (símbolo es una palabra que viene del griego symbolum, hace referencia a un signo, contraseña, reconocer, reunir), por ejemplo las hierbas eran símbolo o signo de los astros y los astros a su vez eran signos de entidades metafísicas, entonces si la persona quería realizar algún ritual independiente del carácter de este, se recolectaba cierta hierba, en la hora de cierto astro y a través de la ceremonia ritual y el uso especifico de aquella hierba se establecía un nexo con aquellas fuerzas, entidades, dioses, o arquetipos. Ese nexo le permitía a esa persona materializar esas fuerzas, gracias a un soporte de origen vegetal. Es interesante y cabe destacar que en su mayoría las sustancias vegetales utilizadas en ceremonias mágicas contienen principios curativos, así es que quizás, de algún modo al sahumar, quemar, o en el uso de algún baño ritual, los principios curativos de estas hierbas generaban estados distintos de conciencia dando como resultado un proceso de acción mágica en el individuo.
A propósito de relaciones simbólicas diré que, en su mayoría, las culturas alrededor del mundo veían las relaciones en términos duales, es decir, positivo-negativo, masculino-femenino, o sea, en términos polares. Hoy en día esas determinaciones o definiciones no son estables y han ido cambiando, así es que no me fijaré en cuestiones tales como que hay hierbas masculinas y femeninas, sino más bien al uso y aplicación que se les da a diversas hierbas denominadas mágicas.
Los términos o conceptos que utilizaré tienen una carga semántica variable según quien la utilice, por ejemplo, energía, para alguien relacionado al ámbito científico esta palabra tendrá una carga y sentido muy distinto al de alguien que se ocupe de cuestiones relacionadas al ámbito esotérico.
Las hierbas que mencionaré en los siguientes ejemplos se pueden encontrar en cualquier herboristería o verdulería, en el caso de no tenerlas en el jardín o huerta para quien tuviese esa posibilidad.
Limpieza o armonización de espacios físicos, casa, habitación, etc. El uso de estas puede ser a través del armado de un ramillete o quemándolas en recipiente que tolere el fuego con el objetivo de sahumar el espacio que se desee limpiar. Existen varias maneras, pero una muy efectiva es sahumar por los cuatro puntos cardinales de la casa, asociando cada punto a uno de los cuatro elementos: A continuación se nombra las hierbas que se puede utilizar. Elemento fuego: albahaca o caléndula; elemento aire: diente de león o anís; elemento agua: manzanilla o eucalipto: elemento tierra: cola de caballo o ruibarbo.
Si la persona cree en alguna entidad metafísica puede hacerlo pidiendo el favor de la misma en la limpieza. Mucho se ha dicho sobre el modo correcto de hacer un trabajo de limpieza por medio de hierbas, cada corriente o sistema de creencias tiene una forma distinta, acá aplica la frase: “Cada maestrillo con su librillo”. Lo que es seguro es que si sahúmo con alguna hierba del tipo que sea, esta, al tener principios activos actuará en la persona generando sensaciones como relajación, calma, placer etc. Esto tiene sentido, ya que al respirar el humo este producirá efectos fisiológicos en el cuerpo. Dicha acción no genera una limpieza si lo pensamos en términos de energía psico-espiritual, la limpieza a nivel energético se hará efectiva cuando la persona por medio de su intensión, voluntad e imaginación exprese en el acto verbal lo que desea.
Limpieza o armonización energética personal. En este uso está el sahumar a la persona y los baños corporales. Algo a tener en cuenta es la diferencia entre la limpieza de un espacio material y la de una persona. Durante tres años trabajé en un lugar que se especializaba en ciertas cuestiones relacionadas al ámbito esotérico, ocultista y mágico, donde a diario se hacían rituales de limpieza o purificación, entre otras cosas, del lugar de trabajo y de quienes trabajábamos ahí, y puedo decir que la limpieza energética de un lugar es efectiva en tanto se realice la limpieza energética de la persona primero, ya que si se limpia una casa y los habitantes del lugar tienen alguna carga energética que les impida estar bien, la limpieza del lugar no será muy efectiva, durará solo un rato y se volverá a cargar con la energía de los habitantes. Por eso quizás lo más indicado sería una limpieza previa personal y posterior a eso la limpieza o armonización del lugar. El sahumado es bastante conocido, se aplica pasando el ramillete, por todo el cuerpo, planta de los pies, palmas, cabeza, acompañado de intención y voluntad junto con alguna oración. El baño es excelente para armonización o limpieza energética pero no es tan accesible ya que no todes tienen la comodidad de tener una bañera o tina en el baño de su hogar, en el caso de no tener acceso a eso, la opción es tener algún recipiente en donde se puedan colocar las hierbas a ocupar, llenarlo con agua caliente de la ducha y verterlo desde la cabeza para que corra por el cuerpo esto siempre acompañado de intención, imaginación y voluntad. Cuando digo voluntad me refiero a la acción que nos moviliza cuando deseamos algo. En el siguiente ejemplo se aplican hierbas asociadas a los siete astros principales de la astrología, que a su vez tienen relación con los siete centros energéticos o chakras de una persona.
Hierba solar: caléndula, romero o té; hierba lunar: jazmín o lirio; hierba mercurial: cedrón, hinojo o menta; hierba de Venus: artemisa o llantén; hierba de Marte: tabaco o cardo; hierba de Júpiter: anís o madre selva; hierba de Saturno: cola de caballo u olmo. No está demás decir que estas hierbas también se pueden utilizar para otros propósitos.
El último ejemplo será el uso de amuletos vegetales para protección y prosperidad, cada persona entenderá estos conceptos según la apreciación personal que tenga de estos.
Las hierbas a elegir en este caso para la protección energética de un lugar o persona son: ajo, albahaca, malva, marrubio, mejorana. En el caso de usarlas para proteger el ambiente de algún espacio físico, estas se pueden colocar en bolsitas de tela, en los 4 puntos cardinales de la casa así se tendrá cubierto todo el espacio, en el caso de ser utilizadas para la protección propia se pueden poner en algún frasquito chiquito, o bolsita de tela y traerlas consigo, recordar que siempre es importante la intencionalidad, imaginación y voluntad, ya que de este modo cargamos de fuerza el amuleto herbal.
Para la prosperidad las hierbas pueden ser las siguientes: almendra, avena, benjuí y menta. Acá lo ideal sería quemarlas para sahumar, acompañadas de algún pedido relacionado con la prosperidad, también se pueden mezclar con otras hierbas como las de protección y traerlas en una bolsita o frasquito.
Espero que esta breve columna sirva de aporte para quienes les guste el uso de hierbas en el ámbito mágico. Varias de las hierbas mencionadas son de conocimiento popular y más de alguna persona de nuestro entorno conocía sus aplicaciones.
Germán Contreras
- Estudiante de Filosofía y Esoterismo
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