Desde hace milenios el ser humano ha tenido una estrecha relación con el mundo o reino vegetal, va desde la agricultura, perfumería, decoración y medicina. Sobre el primero, la agricultura, cultiva vegetales para su alimentación y dieta. La perfumería se da a partir de la extracción de los aceites esenciales de ciertas flores, las mujeres y los hombres del mundo han perfumado sus cuerpos, se han decorado templos, palacios y hogares con diversas plantas, que hoy llamamos ornamentales. Finalmente, la medicinal o curativa es, quizás, la más importante de las relaciones que tiene el ser humano con el reino vegetal.
El uso de plantas con fines medicinales contiene una data histórica tremenda, ríos de tinta se han derramado relatando las maravillas y las propiedades curativas de múltiples hierbas alrededor del mundo. El espectro curativo del mundo vegetal es amplio, por lo cual, podríamos hablar de prácticas en donde el uso de ciertas hierbas se da con fines de índole espiritual, por darle un nombre a ese algo que no necesariamente tiene que ver con ámbito fisiológico, el arte de curar o sanar, pongo como ejemplo los viajes psico-espirituales utilizando plantas de poder.
Dentro de las practicas chamánicas el arte curativo engloba dos aspectos, el chamán tenía el poder de curar el cuerpo y también el alma del enfermo, ya que se pensaba que la enfermedad o mal podía tener un origen espiritual, dicho de otro modo, por un desequilibrio interno y por otro lado uno de carácter supra-natural donde el origen del problema provenía de alguna entidad o ataque maléfico, en ambos casos el chamán o la chamana utilizaban el poder y las propiedades curativas de ciertas hierbas para sanar al enfermo.
Menciono lo anterior como dato indicador porque lo que más se indica hoy en día es el uso de hierbas en el ámbito chamánico o iniciático. Muchas personas han escuchado sobre chamanes, curanderas y curanderos, es algo que se oye bastante dentro de las prácticas holísticas o de salud alternativa. Sin embargo, existe una práctica o paradigma denominada espagiria vegetal o alquimia verde, escasamente mencionada en las latitudes del hemisferio sur.
El origen del término alquimia es ambiguo y hay muchas teorías de su posible origen, de lo cual quizás escriba en otro momento si la posibilidad se da. El término del cual me ocupare para hablar de la relación entre plantas curativas y alquimia será la espagiria.
Espagiria, más que un término es un concepto, el vocablo en su etimología procede del griego «σπαω» (spaō) extraer y «αγειρω» (ageirō) que quiere decir unir o reunir. Esta palabra o concepto aparece por primera vez en el Opus Parimirum obra del célebre médico, astrólogo y alquimista Suizo, Theophrastus Phillippus Aureolus Bombastus von Hohenheim, más conocido como Paracelso.
El concepto espagírico de extraer y reunir es en cierto modo lo que representa el principio alquímico: solve et coagula, es decir disolver y coagular.
A partir de lo dicho, podemos decir que la espagiria es el arte de extraer los principios activos o curativos de plantas medicinales para luego reunirlos con vías a curar y restaurar los múltiples aspectos de la salud del sujeto, y digo diversos, ya que bajo el paradigma espagírico alquímico todo ente, ya sea de origen mineral, vegetal y animal-humano, está constituido por lo que bajo la óptica y conceptualidad occidental seria alma, espíritu y cuerpo. Ahora bien, en este sentido, las hierbas en el caso de las medicinales estarían constituidas por estos tres principios o partes, los cuales hacen referencia al azufre para describir al alma, mercurio para hablar del espíritu y sal para mencionar al cuerpo.
Ahora bien, cuando hablamos de azufre o alma de alguna hierba nos estamos refiriendo a los aceites esenciales, los cuales se cree que son la expresión del alma o esencia misma de la planta, ya que se piensa y sostiene que en el aroma yace la esencialidad de esta. El mercurio o espíritu se manifiestan en el alcohol de dicha hierba. Por último, nos queda la sal o cuerpo de la planta, donde está la materialidad de la misma, la cual contiene los oligo-elementos o cargas minerales. De esta forma, tenemos la triada constitutiva de cualquier ente del reino vegetal.
Es interesante que ninguno de estos principios o al menos dos de ellos, sean evidentes ya que ni el alcohol, ni los aceites esenciales se pueden ver al tener en nuestras manos una hierba medicinal, solo a través de la extracción, separación y disolución es que estos principios se nos hacen manifiestos o más bien visibles. El procedimiento mediante el cual se extraen estos tres principios o estados de la planta, es un punto en el cual me detendré a continuación.
Por medio de la destilación se extrae el aceite esencial o alma (azufre) de la planta. A través de la fermentación obtenemos el espíritu u alcohol (mercurio) y a través de la calcinación y posterior lixiviación del residuo que queda de la hierba extraemos su sal o cuerpo. Un punto importante a considerar es que este procedimiento se realiza con la intención de obtener estos principios lo más puro o descontaminados posibles, ya que se busca eliminar todo agente heterogéneo de la hierba a utilizar, para posteriormente reunir estos principios en un remedio que tenga la facultad, propiedades o energía necesarias para curar, reestablecer y armonizar la salud de la persona.
De forma adicional, bajo el marco espagírico alquímico se establecen relaciones astrológicas y mágicas, ya que las plantas se recolectaban cierto día, en cierto horario, donde el cielo y la luna cumplían ciertas características. En este sentido, se disponía un espacio sólo para la práctica espagírica, la cual tenía que cumplir con requisitos específicos: era en el laboratorio (palabra compuesta por labor-oratorio) donde se realizaban jaculatorias y se recitaban entonaciones para generar ciertos estadios y así establecer un campo energético óptimo para el trabajo espagírico, clara base de la ritualidad que implicaba la preparación de los remedios espagíricos.
Por último, señalaré que las medicinas de origen espagírico tienen propiedades maravillosas e increíbles y esto lo sé por la experiencia que he tenido con este modo de curar. Para cerrar diré que, de este paradigma legendario e histórico, con los años han surgido otras prácticas herederas, como lo son la homeopatía y las flores de Bach.
Germán Contreras
- Estudiante de Filosofía y Esoterismo
- ✉️ simbologiayalquimia@gmail.com
¡Muy interesante el artículo! Me quedó la intriga con el origen del término Alquimia. Esperaré la próxima publicación. Gracias!
Hola Tomás!!, gracias por tu comentario, en una próxima publicación aclararé lo mejor posible el Termino Alquimia y algo más, así dejará de ser una intriga o quizás se generen nuevas intrigas.
Saludos.!!!